En Quercus Jardiners tenemos varios jardines a los que realizamos tareas de mantenimiento en los que tenemos que lidiar con el problema de los animales, como los perros y gatos, que invaden el jardín. En muchos casos, los animales son de la propia casa, por lo que el problema no es tan grave. Pero cuando tenemos gatos que vienen de fuera a remover tu tierra o comerse las plantas, tenemos que actuar.
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Educar a los animales para que no invadan tu jardín
El mejor truco para que los animales no te destrocen el jardín es no dejar pasar a gatos y perros a la zona exterior, pero entendemos que uno de los motivos por lo que tenéis un patio, terraza o jardín es para que lo disfruten los animales. A los gatos y a los perros podemos enseñarles que no deben pisar la zona ajardinada o con plantas diferenciándola con, por ejemplo, un camino de piedras. El camino se puede realizar al diseñar al jardín o fijándonos por dónde suele ir el animal para que el sendero sea el mismo camino.
También podemos dejarles una zona de juegos, es decir, una zona de jardín con grama, así podrán saciar sus ganas de jugar y escarbar en aquella zona y te dejarán el parterre en paz.
Los olores y los animales en tu jardín
A veces intentamos poner cercados en todas partes para evitar que los perros o gatos lleguen a tus plantas, y nos olvidamos que estos animales tienen un olfato muy agudo. ¿Por qué no jugamos con él para alejar a los animales de tu jardín?
Existen olores repelentes de animales como por ejemplo la naftalina, la cebolla, el vinagre, la menta, la hierbabuena, etc. Si impregnamos de este olor las macetas u objetos cercanos a nuestras plantas o árboles, conseguiremos repeler a los animales.
Los animales pequeños, por norma general, no se acercan a zonas que desprenden olores de animales más grandes. Es por esto que también se vende orina de animales como el zorro o el coyote.
En el caso concreto de los gatos, éstos aborrecen el agua, así que si mantienes tus macetas o tierra húmedas, es probable que el gato no se acerque o haga un agujero. Tampoco aguantan el vinagre, pero cuidado con tirarlo directamente al jardín. Es mejor que empapes trozos de tela y los esparzas por las zonas afectadas de tu jardín.
Otros remedios para alejar a los animales de tu jardín son el café, aceites esenciales o el Vick vaporub.
Si aún y usando estos trucos, los gatos o perros siguen escarbando la tierra de tu jardín o césped, entonces puedes usar la rejilla de metal, que pondremos justo debajo de la zona afectada.