¿Y cómo beneficia el acolchado a nuestro huerto o jardinería ecológicos? Bien, primero de todo, estamos usando restos de otras plantas, flores u otros materiales que no usamos (y que son biodegradables) con lo cual no gastamos en tierra que puede estar enferma o cualquier otro material no biodegradable. Esta capa de acolchado que hemos puesto a la planta o árbol hará de capa protectora, conservando así la humedad sin que salgan malas hierbas. Además, a medida que se descomponen los materiales que hemos puesto, éstos aportaran nutrientes a la planta.
¿Qué podemos poner para conseguir un buen acolchado o mulching? Todo lo que tengáis en el jardín: pinaza, hojas, hierba, grava, piedra volcánica, paja, serrín, cáscaras de alimentos… Incluso la mezcla de varios materiales y restos os pueden permitir jugar con los colores y dar un toque diferente a vuestro jardín o alrededor de vuestro huerto ecológico.
Con esta técnica, reduciremos la carga de trabajo y mantenimiento del jardín o huerto y reduciremos también la cantidad de agua de riego, puesto que, como ya hemos comentado, esta capa acolchada permite mantener la humedad dentro de la tierra. Además, la capa de mulching proporciona una temperatura más o menos estable en el interior de la tierra de la planta, por lo que los cambios de temperatura bruscos no los sufrirán tanto las raíces.
Si en tu caso no tienes jardín o huerto ecológico pero te gusta la idea, puedes también usar esta técnica en macetas grandes que tengas en casa o en la terraza para plantas ornamentales o decorativas.
Estructura de la capa de acolchado de un jardín ecológico
La capa de acolchado tiene una vida que puede superar los 3 años (según el material que uses, por ejemplo, si sólo usas paja y heno, durará 1 año). La grava te permite dar color a la planta y “esconder” el acolchado. La capa no debe tocar la planta o el árbol, si no que tenéis que dejar una distancia entre ambos. La capa mulch debe ponerse encima del riego por goteo, si es necesario. Las capas acolchadas de 3 a 6cm son suficientes, pero puedes llegar a los 15cm de grosor. No hace falta que retires la capa de acolchado cuando la quieras cambiar, siempre puedes añadir los elementos nuevos por encima.
Es recomendable esperar a que la planta o árbol haya crecido puesto que la constante humedad puede afectar en su crecimiento o en el germinado de semillas. Si usamos la paja tendremos una capa de acolchado barata y buena para las hortalizas, se biodegrada rápido, pero cuidado, puede quitarle nitrógeno a la planta. La grava dura bastante tiempo y es muy decorativa sobre todo para plantas perennes, pero no es buena para plantas que requieran suelos ácidos. También puedes usar periódicos debajo de la capa de acolchado, aunque la tinta podría llegar a ser un problema si ponemos muchas hojas.
Si tienes un jardín, puedes usar el propio césped cortado, rico en nitrógeno. Eso sí, el césped puede traer otras semillas o residuos de pesticidas o fertilizantes. El serrín conserva la humedad y evita las malas hierbas, pero se descompone rápido y en caso de compactado, no permitiría el filtrado del agua. Los trozos de corteza pueden usarse en jardines y huertos ecológicos. Los trozos son irregulares y por lo tanto estéticos, no se descomponen rápido. La desventaja es que con las lluvias la corteza flota.
Las hojas trituradas puedes encontrarlas en tu propio jardín o en la calle, sobre todo ahora en Otoño. Si la planta está en el exterior, cuidado, al ser tan ligeras volaran. Y por último, tenemos la pinaza. Este material evita la aparición de malas hierbas y es duradero además de estético. Eso sí, se necesita bastante cantidad para un acolchado o mulching adecuado.
Consejos para un buen acolchado en tu huerto ecológico o jardín
Antes de crear la capa de acolchado, airea bien la tierra y retira las malas hierbas. El suelo debe estar húmedo. Distribuye de forma uniforme el material deseado y cubre toda la superficie sin tocar la planta o el árbol para evitar pudrirse. Justo después, riega la zona.
En cuanto al huerto ecológico, usa esta capa de acolchado en zonas de descanso donde no cultives en los próximos meses, así regeneraremos los nutrientes y las cualidades de una buena tierra para la siguiente siembra. Incluso puedes usar plantas fijadoras de nitrógeno para una restauración y regeneración rápida de la fertilidad de la tierra. Algunas de estas plantas son la alfalfa, avena, cebada, maíz, lentejas, trébol o helecho.
Esperamos que este artículo os haya servido, si tenéis cualquier duda podéis consultarnos sin compromiso. Recordad, Don’t worry, be Quercus.